Henry William Burgess (c. 1792-1839), paisajista de Guillermo IV y maestro de John Leech y Thackeray, formó parte de una reconocida dinastía de pintores que floreció en los siglos XVIII y XIX. Fue conocido especialmente por sus dibujos de árboles y paisajes.
Algunos de los bocetos de la colección son de lugares pintorescos específicos, como las ruinas de la Abadía de Bayham, en Kent, o la Abadía de Leiston, en Suffolk, pero muchos son escenas topográficas romantizadas, de gargantas continentales o parques ingleses.
Burgess fue maestro de dibujo en la Escuela Charterhouse y se convirtió en paisajista de Guillermo IV en 1826. Destacó en el dibujo y la pintura de paisajes, siendo especialmente conocido por sus dibujos de árboles. En 1827, junto con el litógrafo Charles Joseph Hullmandel (1789-1850), publicó un libro de grabados a partir de sus dibujos, con el subtítulo: Vistas del carácter y la apariencia general de árboles extranjeros e indígenas en relación con paisajes pintorescos. En este libro, y en la presente colección de dibujos, el énfasis se centra tanto en el arte del dibujo en sí como en los temas representados. Los árboles, con su exuberante follaje y sus ramas nudosas y retorcidas, ofrecen un excelente tema para la variedad tonal que se puede lograr con el grafito y la litografía posterior. Los bocetos en tinta sepia y las acuarelas de la colección también muestran la maestría del artista en la gradación tonal y la libertad de línea. Burgess y Hullmandel se encuentran entre los primeros practicantes de la litografía en Inglaterra. La atención de Burgess a las cualidades de la luz exhibida lo vincula con sus contemporáneos John Constable y JMW Turner.
H. W. Burgess residía en Chelsea, al igual que el resto de su familia. Entre 1809 y 1839, expuso numerosas obras en la Royal Academy, la Suffolk Street Gallery y la New Water-Colour Society de Londres. A finales de la década de 1820 y principios de la de 1830, Burgess impartió clases de dibujo a los marqueses de Lothian, entre ellos Lady Harriet Kerr (1780-1833) y su hija, Lady Anne Katherine Kerr (1812-1829). Varios de los dibujos de Burgess de esta colección se acompañan de otro boceto del mismo tema realizado por un miembro de la familia Kerr, lo que ofrece un interesante contrapunto para apreciar la maestría de Burgess y permite comprender mejor sus métodos de enseñanza.
Las obras de Burgess se pueden encontrar en la Colección Real, el Museo Británico, el Museo Victoria y Alberto, el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York y el Centro de Arte Británico de Yale, New Haven.
